Cuando tú duermes, en ese momento finaliza mi día.
Entonces ausente, las estrellas hacen su labor de tomar tu lugar temporalmente,
pero jamás reemplazarte.
Imagen de Bloglovin |
Las manecillas que se me habían hecho una tortura,
habían dado por fin con su objetivo principal aquí,
en el tiempo y lugar que te di para hospedar conmigo, descubrí más de una vez que yo no era para ti.
En tu enorme y misterioso mundo de discursos amargos, si no fue tu intención, con seguridad pude entender, que jamás pertenecería allí.
La campana suena en el atardecer,
tu sonrisa como si fuera el sol,
no terminé las cartas de ayer,
voy corriendo descalza hacia ti,
donde quedamos la última vez.
Mi día comienza a las nueve exactas,
probablemente cuando despiertas tu,
mi cabello intenta lucir pero es inútil,
voy yendo tarde hacia aquel lugar,
aquel donde quedamos la ultima vez.
Miré el reloj y es de noche por aquí,
jamás olvidaré lo que para ti quise ser,
quise alcanzarte y muy alto brinqué,
por lo viejos días que te amé entero,
decidí ir hacia ese lugar de la otra vez,
en donde quedamos la última vez,
En alguna parte que ya olvidé.
Hace tanto que no te escucho, no te veo, no te leo, no muchas cosas. Los días se me han hecho tan ligeros últimamente, tanto así que me he dado el lujo de pensarte mucho más de lo que me permití hacerlo hace tiempo. Desde que te fuiste frente a mis ojos, desde mi puerta y de mi corazón, sólo has permanecido en una de ellas. No fue de la manera que esperaba que te quedaras. No te puedo dar la razón en muchas cosas ni a mí, pero en una estoy de acuerdo y es el haberte ido. La situación en ese entonces fue una idea devastadora, el perderte de vista, de mí y mi vida, el error preciso para salvarme, sentía un enorme miedo de ese cambio, porque precisamente en ese entonces te amaba como jamás lo hice. Fuiste capaz de lo que yo hubiera querido hacer antes, en un momento donde las cosas a mis ojos tenían remedio y esperanza. Algo que poco a poco se fue marchitando hasta dejarme atada y a la costumbre de siempre discutir y herirnos...
No eramos totalmente distintos, nuestros mundos lo eran, pero hacíamos clic, no perfectamente, teníamos cosas de que hablar, aunque fueran pocas en común, cosas buenas que las acciones y palabras de cada uno fueron amenorando con rapidez. Pasar la tarde acostados o sentados uno frente al otro hablando sin final sobre un futuro que parecía nuboso pero feliz. Y aunque no pudiera ver un futuro junto a ti muy claro, lo deseaba con toda el alma y lo escribía en mis noches de sueños. Posiblemente no comprendas que irte no fue la peor de las decisiones que has tomado conmigo, pero si la más grata para entender que relevancia tenía yo en tu vida, como jamás tu en la mía. Fue el punto clave para entender aquellas cosas que no comprendí jamás de nosotros. Cuando pensé que mi vida estaba en ruinas, cuando pensé haber hecho las cosas bien y todo estaba mal, en menos de lo que imaginé que tardaría, estaba de nuevo frente al espejo por la mañana, sonriendo sin ti. Entendiendo a pocos pasos de mi camino que fuiste mi mayor fracaso y al mismo tiempo el mejor éxito personal, que sin ti no hubiera entendido lo gratificante de volver a levantarme y confiar.
Te recordé empezando así, por más lucha que hice, no fue suficiente y hoy recordé mi derrota. Te dejé ir y aunque no hubiese sido el mejor plan que tenía para nosotros, hoy es un gusto dejarlo así, me llevo todo lo que me enseñaste. Tuve agallas como para dejar ir todas las mañanas y noches, todos los días que nos dedicamos a perdernos y recuperarnos, en las luces de una ciudad que nos gritaba el peligro de haber sido sus favoritos.
B.M
Mis manos cálidas puestas en tu corazón,
parece que la lluvia no cesa de tu pensamiento,
mi pecho está cubriendo tu otoño temporal.
Tus manos frías puestas en mi corazón,
parece que soy yo la lluvia de tu pensar,
tu pecho mira contra mi dirección.
La brújula apunta firmemente hacia ti,
el reloj en contra de tu letal indecisión,
yo siempre de segundo, la primera tu.
Las cortinas cerradas de tu habitación,
la membrana del invierno pegada en ella,
anuncian que en ti está mi definición.
anuncian que en ti está mi definición.
¿Cuando esto podrá cambiar de estación?
Al final de mi libreta tu nombre se esconde,
y los verbos y adjetivos se confunden,
yo esperando primavera, pero no llegas tú.
No ha pasado mucho tiempo,
pues realmente es Marzo,
sintiéndose tan diciembre hoy.
Tengo dudas:
¿Estarías dispuesto a permanecer siempre a mi lado? Amanecer todas las mañanas y ser la primera persona que veas en el día, quien duermas por las noches. Desayunar, comer y cenar todas mis comidas y yo las tuyas. Oler mi cuello cada que nos abracemos. Abrazarme cada uno de nuestros días. Tomar de mi mano con el fin de no separarnos y que nada nos separe. Salir al cine, a comer, jugar y platicar conmigo. Al discutir sentarnos y tomar un vaso de vino o refresco, mientras conversamos nuestras diferencias para unirlas de nuevo. Soportar nuestras caídas y mis malos humores. La misma risa para tus oídos, la misma voz cantando para ti cada noche. Los mismos ojos que te verán y te seguirán. Mi cabello despeinado, largo y tal vez corto, en nuestros días especiales brillando para y solo por ti. Besar solo mis labios, acariciar mi espalda y cualquier parte de mí. Hacer el amor solo conmigo. Verme maquillada y desmaquillada. En mis mejores momentos y en los peores. Una familia con un poco de mí y de ti. Esperarnos y confiar que en cada desviación de nuestro camino, el amor que nos tenemos y Dios nos mostrará el camino de vuelta a casa.
Porque yo lo estoy.
Si susurras mi nombre en la noche,
abre las cortinas de la ventana,
una, dos, tres veces susurra mi nombre
después déjalo y vuelve a olvidarme.
Corre las cortinas que están sucias,
vuelca el cajón de mis cartas y regalos,
tíralo por allí u obsequialo a alguien más,
después déjalo y vuelve a olvidarme.
Mira ese parque con alegría,
mira todos los arboles y flores de cerca,
suspira y mírame en las estrellas,
después déjalo y vuelve a olvidarme.
No pienses que será de mí,
mucho menos planees venir aquí,
si me extrañas, hazlo así de lejos,
después déjalo y vuelve a olvidarme.
Querido David:
Hace mucho que no nos comunicamos. Me ha dado tiempo para pensar en mí. Tu querías vivir juntos y ser infelices para ser felices. Considerarlo un tributo de mi amor por ti, que acepté esa oferta tratando de hacer que funcionara.
Una amiga me llevó a un lugar asombroso que se llama el Augusteum. Augusto Octaviano lo construyó para poner sus restos. Al llegar los bárbaros arrasaron con él. Augusto el primer gran emperador. ¿Cómo se podía imaginar que un día Roma, que todo su mundo estaría en ruinas?Es uno de los lugares más silenciosos y solitarios de Roma. La ciudad ha crecido a su alrededor durante siglos. Parece una herida preciada, un corazón roto que no quieres soltar porque duele bien. Todos queremos que las cosas sigan igual. Conformarse con vivir infelices, por miedo al cambio, a un derrumbe. Miré éste lugar y todo el caos que ha sufrido, como ha sido adaptado, saqueado, quemado y reconstruido. Me sentí reconfortada. Quizá mi vida no sea tan caótica, pero el mundo lo es. La trampa es encariñarse con una parte de él.
La ruina es un regalo. La ruina es el camino a la transformación. Aún en esta ciudad eterna, el Augusteum me mostró que hay que estar preparados para oleadas de transformación. Los dos nos merecemos algo mejor que seguir juntos porque tememos a la destrucción si no.
Comer, rezar amar.
B.M
Luces muy bien este verano,
¿decías que yo te opacaba?
tu mi sueño del verano pasado,
parece que te va de maravilla,
aun cuando yo no estoy a tu lado.
Tu, la sombra de mis errores,
el llanto de mi cama,
la delta de mis temores,
tu ausencia es extraña,
con tu sueter de estoperoles.
¡Para ya de estropear mi calma!
Luces tan bien este verano,
pero cariño, no más que cuando yo estaba.
Te vi caminando con una sonrisa bien portada desde el corazón, tus ojos miraban hacia todos lados sin mirarme a mi ¡Hey, eso me destrozó! Tomé mi mochila y mis mangas rotas en mi suéter de bolsón, había olvidado mi labial de cereza, pero mi esencia perfumaba de bombón.
Allí, una perfecta simetría, con ángulos inequívocos, volteaste a verme, tus pupilas me apuntaban y yo que aún no podía verte, me deslicé el cabello y mi corazón tan latente. Tal vez no lo entendías, que yo jamás te hablaría, que quizá mi corazón no te lo entregaría, que tendría miedo y te rendirías. Pero me hablaste y todo aquello se iría. Contigo escuché la melodía de la vida.
Allí, una perfecta simetría, con ángulos inequívocos, volteaste a verme, tus pupilas me apuntaban y yo que aún no podía verte, me deslicé el cabello y mi corazón tan latente. Tal vez no lo entendías, que yo jamás te hablaría, que quizá mi corazón no te lo entregaría, que tendría miedo y te rendirías. Pero me hablaste y todo aquello se iría. Contigo escuché la melodía de la vida.
Por favor ven acá arriba.
¿Porqué no reconocemos que tenemos una relación mala y seguimos de todos modos?
Aceptamos que peleamos mucho, ya casi no hacemos el amor, pero no queremos vivir el uno sin el otro. Así podemos pasar todas nuestras vidas juntos, infelices, pero contentos de no estar separados.
Comer, rezar, amar.
B.M
B.M
Cuando era niña y aprendí a leer recuerdo que pensé que era lo más increíble que me había pasado. Leía absolutamente todo lo que caía en mis manos; publicidad, novelas, propaganda, libros y hasta lecturas prohibidas para niños. Me encantaba el spoiler y me adelantaba capítulos enteros en la primaria. Me obsesionaba saber de todo sobre todo y de algún modo pensé que la vida me atraparía por sorpresa y que por arte de magia encontraría mi camino. No fue así.
Admiro muchísimo a la gente que sabe lo que quiere, que lo descubre y va por ello a lo largo de su vida. Nunca tuve claro que era lo mío o qué era para mi y he estado dando vueltas por ahí.
Supongo que uno tendría que agradecer al último que dio la vuelta y se perdió en la esquina, a ese que rompió promesas y se fue, esos amores rotos lo hacen a uno preguntarse una vez más sobre la vida. Porque de nuevo estas parada sola, lista para que esas preguntas que haces a un lado cuando eres "feliz" y entonces te golpean de nuevo como un camión.
Admiro mucho a la gente que sabe lo que quiere porque me imagino que ha de ser muy feliz levantarse en las mañanas mirando una meta, trazando un camino, echando raíces. Y la verdad que yo me la he vivido de un lado a otro desde hace años. Como un extranjero, haciendo amigos de ratos aquí y allá, jugando a la pareja feliz en una ciudad y en otra.
Mirando el techo tratando de dormir, en este cuarto tan mío, en este cuarto que es como mi quinto cuarto. Me he preguntado en esta ciudad tan grande que ahora es mi nuevo hogar y que no sé si acaso lo será por mucho tiempo. Y entonces me llega de no sé dónde, y algunas respuestas, aunque pocas me cruzan.
He estado amando amores sin ser yo, buscando respuestas en personas equivocadas y matándome de apoco de nostalgia. Y me ha quedado claro, la única constante en mi vida ha sido mi deseo de aprender. Mi único plan es seguir avanzando, seguir aprendiendo y con surte encontrar un lugar que no me haga sentir una forastera. Porque nunca entendemos que para encontrar el amor uno debe verse a sí mismo, y esa... ha sido mi cruz, mi propósito inconcluso, lo que me tendrá vagando un tiempo más.
Karen Reyes
Hay momentos en los que debes dejar de pensar tanto y poner atención a lo que sientes. Las cosas que pasan o suceden, se pueden solucionar, para saber cuando, necesitas escuchar a tu corazón. Si piensas más que sentir, las cosas las querrás solucionar cuando sea tarde.
B.M
Aunque te hayas ido,
aunque no comprendas que jamás quise alejarte,
aunque me heriste como nadie,
Yo sólo quiero que seas feliz.
aunque no comprendas que jamás quise alejarte,
aunque me heriste como nadie,
Yo sólo quiero que seas feliz.
Aunque la luna no está,
aunque las estrellas estén detrás de la lluvia,
aunque te fuiste de mi cielo,
aunque las estrellas estén detrás de la lluvia,
aunque te fuiste de mi cielo,
Yo sólo quiero que seas feliz.
Aunque aun te quiera,
aunque trato de buscar la vida,
aunque sé que tu no querrás ser la mía,
aunque trato de buscar la vida,
aunque sé que tu no querrás ser la mía,
Yo sólo quiero que seas feliz.
Aunque tengas razones,
de buscar el sol en la noche,
aunque creas que esto es la eutanasia,
de buscar el sol en la noche,
aunque creas que esto es la eutanasia,
Yo sólo quiero que seas feliz.
Aunque te quiera a morir, te quiera aquí.
Yo sólo quiero que seas feliz.
Aunque sea tarde,
la luna se esconda y el cielo se nuble,
aunque un día del cielo te baje el eclipse.
la luna se esconda y el cielo se nuble,
aunque un día del cielo te baje el eclipse.
Quiero que sepas que si no es conmigo,
sólo quiero que seas feliz.
"Yo nunca necesité de tiempo para saber que te amaba, fue duro para mí. Un día dejé de comparar a todos contigo y simplemente conocí al indicado"
How to be single
Ya he olvidado el momento emotivo del a escena de Inside Out. Fue ridículamente devastador el sacrificio de Bing Bong, así que déjenme llorar por un personaje ficticio(?).
Recuerdo lo simbólico que fue en el momento. El momento fue gracioso, así que imaginen la escena de Bing Bong sacrificándose y cayendo al vacío mientras alegría bien egoísta estaba por salvarse. Mi acompañante empezó a llorar y yo empecé a reírme porque nunca lo había visto llorar y entre risa y risa, también empecé a llorar.
Los días sin ti, me agobiaron con sus lecciones.
Ayer me equivoqué, ayer me hicieron llorar,
mientras escurrían gotas en la almohada envuelta en luna,
me gritaron que no me amabas.
Las noches de marzo,
Las noches de marzo,
las hojas que no pudieron tomar color y no lo harán.
El color verde que jamás desaparecerá de ti
que en lagunas juegas a querer primaverar
sin haber otoñado bien.
El cielo con lluvia o sin lluvia siempre es cielo
El cielo con lluvia o sin lluvia siempre es cielo
eres un diente de león para una tormenta eléctrica
tomando el martillo del mango, la comodidad a tus pies.
Tanto amor te costó irte, y te faltó para quedarte.
Los días contigo, me enamoraron con sus lecciones.
Ayer hice lo que pude, ayer pude hacerte feliz.
Mientras reía envuelta en tus brazos bajo la luna
me gritaron que no me amabas.
Las noches de octubre
Las noches de octubre
las hojas que habían tomado color y no lo harán nunca más.
El color verde que jamás desapareció en ti
que en mis brazos jugabas a permanecer siempre,
que conmigo o sin mí, serías feliz.
B.M
Escena de "El secreto de Adeline" |
Un día soñé que te perdía, un día soñé que en mi mundo terrenal no estabas a mi lado, desperté asustada y para un gran alivio tenía tus buenos días. Y sólo para confirmar si estarías allí siempre, te pregunté y dijiste "Si, aquí estaré".
Ayer soñé que te tenía, ayer soñé que en mi mundo terrenal te tenía, desperté enamorada y para una gran caída de la pendiente que iba subiendo, no tenía tus buenos días. Y sólo para confirmar que no estabas, recordé que te te habías ido hace tiempo.
B.M